Cuando te diga que esté enfadada, sígueme hasta hacerme reir.
Cuando empieze a enfadarme, gritarte, o a decir mentiras/tonterías, besame, y
dime que me quieres. Cuando me veas andando, tápame los ojos y pregúntame como
si fuesemos dos niños: Quién soy? y sigueme abrazando por un buen rato. Cuando
tenga miedo, protégeme. Cuando me apoye en tu hombro, acaríciame la cara. Cuando
te cuente un secreto, guardalo como si fuese tuyo, tu tesoro. Cuando te mire
fijamente a los ojos, aguanta la mirada, y luego ríete mientras me abrazas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario